Salieron a la venta con tan solo 500 copias cada uno, y luego quedaron como material de coleccionistas, sin reediciones ni nuevos lanzamientos. El primero, LA LEY (1988), mostraba al grupo como un trío con vocalista femenina (la española Shia Arbulú, antes en el grupo Nadie). El segundo, DESIERTOS (1990), fue el primer trabajo de un quinteto con Beto Cuevas en la voz y un ambicioso plan profesional por delante, dispuesto a presentar un pop propositivo y cosmopolita como aún no se conocía entonces en Chile.

Son marcas importantes para la historia de La Ley; los dos trabajos previos a la explosión radial de su música y las giras continentales. 

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En uno y otro proyecto, fue guía creativa fundamental la del guitarrista Andrés Bobe. A treinta años de la muerte del músico, el 10 de abril de 1994, en Santiago, llega un homenaje impulsado desde su familia y colaboradores más cercanos en La Ley. Germán Bobe ha coordinado la reedición de esos dos primeros álbumes, que vuelven a aparecer en su totalidad y en las mejores condiciones: sonido remasterizado y carátulas originales; en soporte doble de vinilo, CD y cassette; con carátulas interiores de fotos antes inéditas y textos con los recuerdos de todos los ex integrantes de la banda.